Identidad y familia social según Olivier Assayas

IRATXE FRESNADA
Gara



Para Assayas, Jean Luc Goddard, todo un tótem, es un creador de aforismos. Pero aún así, se reconoce «hijo profesional» de la Nouvelle Vague, por la labor de aquellos cineastas dice hacen películas. Olivier Assayas se interesa por el paso del tiempo, por las crisis y los cambios de valores que afronta la humanidad. Sin embargo, en sus películas deja libre el camino para que el espectador vea mas allá de lo mostrado.

Su producción se ha caracterizado siempre por una valiente actitud trasgresora en cuanto al estilo de sus filmes y por una elogiable postura anticonformista respecto a la industria.El cine es, para Assayas, un espacio para el arte en constante mutación. Para él, la experimentación forma parte del juego. Juego del que han surgido filmes tan memorables como «Paris S'evelle» o «Finales de agosto principios de septiembre» o tan desconcertantes como, «Demonlover».El que fuera compañero de viaje (su marido y director) de la sofisticada Maggie Cheung, regresa ahora a las pantallas con «Las horas del verano», una cinta en la que nos habla de una y muchas cosas al mismo tiempo.

A través de una película de actores, sencilla en su planteamiento, pero compleja en sus intenciones, el realizador galo nos cuenta la historia de tres hermanos en la cuarentena que heredan una excepcional colección de obras de arte del siglo XIX. La muerte de la madre y el reparto de la herencia desencadenan una crisis entre ellos que les llevará a enfrentarse a los recuerdos compartidos y al valor que cada uno de ellos les otorga. Juliete Binoche, Charles Berling y Jeremie Renier encabezan el reparto de un filme que forma parte de un proyecto que homenajea al Museo de Orsay (en 2006 celebró su veinte aniversario). El resultado del último trabajo del director galo nos invita a reflexionar sobre conceptos como la identidad, la familia, el arte y la globalización en el siglo XXI.

En «Las horas del verano», el director de «Irma Vep» vuelve a hablarnos del desarraigo, del paso del tiempo, de la muerte en definitiva. Desde una narración cuidada y efectiva, a través de una historia sencilla, Assayas convierte lo cotidiano en algo poético y trascendente. Finalizada la etapa de promoción de «Las horas del verano», Assayas prepara su nuevo proyecto sobre Ilich Ramírez Sánchez, «El Chacal». El guión, que coescriben Assayas y Dan Frank, está basado en las investigaciones periodísticas que siguieron la pista del personaje, un personaje oscuro, pero con una historia fascinante que ya tiene quién la rescriba otra vez.