"Un asesinato piadoso", J.M. Guelbenzu (Alfaguara, 2008)


LUIS GARCÍA
Literaturas.com


«Quien una vez abre los ojos, nunca vuelve a dormir tranquilo»


Dos vertientes narrativas viene trabajando José María Guelbenzu con cierta asiduidad: De un lado, novelas como Un peso en el mundo, un auténtico tratado literario por cuanto significó en su carrera un punto de inflexión en una manera de ver y entender la literatura. De otro, obras aparentemente menores pero de igual densidad sicológica que la anterior como No acosen al asesino, La muerte viene de lejos, El cadáver arrepentidoo la reciente Un asesinato piadoso, que encuadradas erróneamente en el genero negro vienen a demostrar la ineficacia de los mismos a la hora de enjuiciar una novela. Y digo que están encuadradas erróneamente en el género negro ya que creo llegado el momento de diferenciar novelas clásicas del mismo (Hammett, Chandler, etc) con estas otras más cercanas a la literatura de suspense o policiaca como el propio autor reconoce. Y es que no por tener un muerto, un investigador y un asesino, debemos hablar de novela negra.

Centrándonos en la obra, ya tenemos de nuevo a la Juez Mariana De Marco, la protagonista de las novelas anteriormente citadas, destinada en esta ocasión en una reconocible ciudad del Norte de España, G..., y de nuevo nos vamos a encontrar con su intuición e ímpetu observador a la hora de investigar un asesinato aparentemente “domestico”.

Creo necesario hacer una observación antes de nada. Aunque Un asesinato piadoso pueda leerse de una forma independiente, pierde fuerza su interpretación si no se han leído las obras anteriores (de hecho los guiños a éstas son constantes), ya que la trasformación sufrida por su protagonista, su ambición profesional y su madurez, no sería entendible de otra forma.

La trama de Un asesinato piadoso es sencilla: un hombre aparece degollado en una endogámica ciudad del norte de España y el crimen parece cometido por su suegro en un malentendido intento por hacer justicia ante los supuestos malos tratos del fallecido con su esposa. Un asesinato piadoso, sin duda: venganza o justicia. Pero estamos en la ciudad de Gijón, por mucho que el autor pretenda disimularlo, una ciudad costera en la que todos se conocen y ningún crimen pude pasar desapercibido, mucho menos el de el miembro de una destacada familia local, y fiel reflejo de esa España profunda que no tiene por qué ubicarse necesariamente en el interior. La novela avanza y se enreda como un rompecabezas, como uno de esos acertijos de nuestra infancia en los que nada parece lo que es, y en donde todos, abuelos, viuda, suegra, parecen tener un motivo para romper la relación de Cristóbal, el asesinado, con su esposa, la desconsolada viuda que “decide suicidarse” en un momento dado para aliviar la carga de su padre y asesino. Y todo salpicado con muestras de afecto de la propia juez hacia la niña huérfana, la hija de Covadonga, con su devenir constante por una ciudad desconocida, y por los devaneos amorosos que mantiene con un ignoto personaje totalmente secundario en la novela. Incluso el propio Guelbenzu se permite el irónico desliz de auto-homenajearse por boca de la protagonista Mariana De Marco cuando ésta compra un ejemplar de Cuento de Viejas, de Arnold Bennett, (pag. 218) siguiendo los consejos literarios de un “autor contemporáneo” tan recalcitrante lector de la novela del siglo XIX como ella. Pero el terrible descubrimiento de la verdad llevará a la Juez Mariana De Marco al convencimiento de que la Justicia también oculta entre sus fauces una siniestra cara, y la hará dudar incluso de la eficacia de la misma a la hora de impartirla, porque “el hecho monstruoso es que de hacerlo con ecuanimidad estaría contribuyendo a condenar a una inocente”.

Una ocasión más para ver crecer “narrativamente” a la protagonista en esta cuarta entrega de la saga, que es tanto como ver crecer a su autor. ¿Irá la vencida a la quinta entrega y otorgará a la Juez Mariana De Marco el poder que sin duda busca, quizás en la Audiencia Nacional?. ¿O volverá Guelbenzu por los fueros de Un peso en el mundo con esa novela de amor con la que lleva atascado varios años?. Estaremos atentos.