El gran negocio hipócrita de la prostitución



Los diarios españoles que publican anuncios de contactos ingresan por ellos más de 40 millones de euros al año. Los directores han hecho caso omiso de la invitación del Gobierno a eliminarlos

SUSANA HIDALGO
Público




"Chicas chinas. 18 años. Muy dulces. Griego. También domicilio y hotel". Por cada anuncio de este tipo, con foto de una chica muy joven incluida, el periódico nacional de mayor tirada se embolsa más de 100 euros. En total, son 15.000 euros al día que proceden directamente de las mafias que explotan a las mujeres, según denuncian las ONG y asociaciones que trabajan por los derechos de las prostitutas.

El mismo diario, unas cuantas páginas por delante de su sección de relax, denuncia en una información, con foto de una meretriz incluida, el "trato inhumano" que recibían las prostitutas en unos burdeles catalanes.

Es "la cara hipócrita" de la gran mayoría de periódicos en España respecto a la prostitución, como denuncia la presidenta de la Federación de Mujeres Progresistas, Yolanda Besteiro. Por un lado, diarios como El País ingresan al año más de cinco millones de euros por los anuncios de contactos; por otro, en sus páginas critican la explotación sexual de las mujeres. "Ningún medio que se proclame defensor de los derechos humanos puede publicar este tipo de anuncios y, si lo hace, se convierte directamente en cómplice de esta forma de esclavitud", protesta Besteiro.

En total, el negocio de la prostitución mueve en España 18.000 millones de euros anuales, teniendo en cuenta sólo el pago de dinero a cambio de prestaciones sexuales, según el informe Los amos de la prostitución en España, del periodista Joan Cantarero.

A esta suma habría que añadirle el movimiento de capital que legalmente generan estos negocios, donde estaría incluido el gasto en anuncios de contactos.

El 13 de marzo de 2007, una comisión parlamentaria calculó en 40 millones de euros anuales el dinero que ganaban en total los periódicos españoles con este tipo de anuncios. El País se embolsa cinco millones al año, ligeramente por encima de lo que ingresa El Mundo, y las cabeceras del grupo Vocento (editor de Abc, donde se publica el suplemento religioso Alfa y Omega) se reparten diez millones.

Una cifra a la que ninguno de los periódicos nacionales y locales está dispuesto a renunciar y menos, según argumentan, en plena crisis económica. Otros periódicos de tirada nacional, como Público o 20 minutos, sí han renunciado a esos ingresos y no publican anuncios de prostitución.

Solicitud de autorregulación

El Plan Integral contra la Trata elaborado por el Gobierno y que entró en vigor el pasado 1 de enero, además de definir a las prostitutas como "víctimas", instaba a los diarios a que, mediante la autorregulación, eliminasen cualquier relación empresarial con la prostitución. Tanto la vicepresidenta del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, como la ministra de Igualdad, Bibiana Aído, afirmaron entonces que el Gobierno estaba trabajando para eliminar los anuncios de prostitución.

Ocho meses después, el Gobierno no ha conseguido ningún consenso. "De la Vega no ha mantenido ningún encuentro con los directores de los periódicos sobre este tema", se limitaron a decir ayer desde su gabinete de prensa.

Aído tampoco ha emitido una petición formal sobre este asunto; si bien "en reuniones con los directores de los grandes diarios para tratar temas generales, la ministra siempre les ha instado a que retiren este tipo de publicidad", señala un portavoz de Igualdad. Una petición que ha caído en saco roto. En plena crisis económica, los directores de los principales periódicos españoles han advertido al Gobierno de que no están dispuestos a renunciar a estos ingresos.

El Plan contra la Trata también incluye el control de dichos anuncios de contacto para ver si detrás están las mafias y, en ese caso, actuar. Pero este punto tampoco se ha puesto todavía en marcha. "El plan tiene tres años de duración y más de 60 medidas que irán entrando en vigor poco a poco", señalaron desde el ministerio de Igualdad.

Para Carmen Montón, portavoz de Igualdad del Grupo Parlamentario Socialista, "lo deseable sería que los diarios tomasen ejemplo de los que no publican anuncios, como Público", aunque Montón también recuerda que los diarios no tienen ninguna obligación legal de retirar esa publicidad de sus páginas.

Los responsables de las principales cabeceras españolas también han hecho caso omiso a las peticiones de las ONG y asociaciones que trabajan por los derechos de las prostitutas. Distintas asociaciones feministas recogieron hace un año unas 2.000 firmas contra los anuncios de contacto y enviaron el listado a los directores de los diarios. "No nos ha contestado ninguno", señala Besteiro.

Para ella, visto lo visto, la vía amistosa en este asunto está agotada. "Con el diálogo, ni el Gobierno ni las asociaciones hemos obtenido respuesta. Es la hora de tomar medidas coactivas", concluye.