Blueberry Hill, del folk al pop sin perder la identidad


RAÜL RUIZ
Sonicwave magazine




Tras presentarse en el circuito discográfico con un álbum debut muy cercano al sonido folk norteamericano, la banda barcelonesa cambia de estilo en su segundo disco, “Giants”. Su apuesta por el pop parece responder a una inercia natural producto del espíritu indagador que abandera BLUEBERRY HILL. Incondicionales de la búsqueda de pinceladas con las que decorar de detalles su música, no han dudado en desplazarse hasta Islandia para grabar en los mismos estudios que la polifacética BJÖRK. Hablamos con María Bennassar e Ivó Iglesias.

Han pasado ya cuatro años desde la aparición de ‘Thanks’, vuestro álbum debut, y supongo que son muchos los que esperaban la aparición de un nuevo trabajo. ¿Cuándo empezó a gestarse este ‘Giants’?

Hay canciones del Giants que tocábamos en los directos hace ya cuatro años, así que no te lo sabríamos decir. Nunca nos hemos sentado a pensar: hay que hacer temas para el segundo disco, no funcionamos así, simplemente sacas lo que tienes dentro cuando lo necesitas; pones unos arreglitos por aquí, violines por allá… Se trata de disfrutar componiendo, hasta que te das cuenta que tienes un material precioso, coherente, y es entonces cuando te lanzas.

Parece que en este segundo disco habéis pasado una transición musical, relegando el neo country en beneficio de melodías más poperas. ¿Por qué este cambio?

Solo hay un requisito en el grupo para decidir si un tema sigue adelante o no: que sea una buena canción. Seguimos apostando por las buenas melodías y los arreglos, y ya sabemos cuándo un tema es BLUEBERRY HILL. A partir de aquí ¿por qué no seguir explorando?

Aun así vuestro nombre sigue sonando a American Western... ¿Es este uno de lo motivos de que decidieseis incluir un tema como ‘Country Is Dead’?

Que conste que no hemos renunciado al rock americano. Seguimos disfrutando escuchando a Gillian Welch, pero en su momento necesitábamos aire fresco y, una autoparodia, siempre viene bien. Al fin y al cabo, tal y como nos preguntó mucha gente con el “Thanks”: ¿qué hace un grupo catalán, con cantante mallorquina, haciendo música americana?, y la respuesta era: pasárnoslo bien. Esto es lo mismo: en Islandia existieron 15 días seguidos con dolor de estómago de tanto reír. ‘Country Is Dead’ o ‘Pornstar’ son un reflejo de nosotros mismos.

Entonces, supongo que no habrán existido cambios significativos a la hora de componer… ¿La inspiración ha surgido sola o se ha tenido que forzar para adecuarla a esta reorientación?

Lo bueno de BLUEBERRY HILL es que compone todo el mundo. Hay épocas en que a unos les apetece más que a otros, pero todos teníamos claro que el proyecto tenía que ser menos folki… e inspiraciones o ideas no faltaron. De hecho, hubo unos cuantos temas que no pudieron coger el avión a Islandia, ¡y eran buenos! Eso me alegra, porque creemos que forzar la inspiración no funciona.

Y ¿cómo acontece esto de grabar el disco en Reykiavik ¿Pasábais por allí y dijisteis: ¡hey! Podríamos grabar aquí el disco? No, en serio, ¿cómo contactáis con Sturla “Mio”?

Nunca sabes si habrá un próximo disco así que siempre quieres hacerlo lo mejor posible. “Thanks” fue especial al contar con Carlos Raya, Garth Hudson o Richard Dodd, y “Giants” tamniçen tenía que serlo, así que pensamos que para ese proyecto diferente que teníamos entre manos necesitábamos un productor especial. BJÖRK, COCO ROSIE, SIGURDSON tienen ese algo más que estábamos buscando. Islandia, de hecho, lo tiene. Fue contactar con GreenHouse, enviar los temas, y aceptaron.

Ahora que lo mencionáis, debe de haber sido una gozada grabar con quien ya ha trabajado con artistas de la talla de BJÖRK…

El currículum de GreenHouse es impresionante. Son profesionales experimentando con la parte técnica, los instrumentos y la música en general. Y eso se ve en temas como ‘Freaks‘ o ‘KO’. Si a eso le añades que el factor humano fue genial, el resultado es una experiencia y un disco inolvidable; al menos para nosotros…

Y veo que esta vez habéis cambiado también de sello, apostando por Lucinda Records… ¿o fueron ellos quienes apostaron por vosotros?

Entre tanta crisis, tantas malas noticias y tanto quejarse, es genial ver como un sello como Lucinda sigue adelante, apostando por la música con tanta ilusión. Y eso es gracias a Vicente Úbeda, que es un entusiasta como muy pocos. Quienes le conocen saben que no podrían decirle nunca que no.

En el poco tiempo que lleva el disco en el mercado ¿qué sensaciones se respiran? ¿Cómo se está recibiendo este disco comparado con el primero?

De momento, las críticas son muy buenas. Parece que a la gente no le importa este cambio, al contrario, todo el mundo nos dice que hemos ganado en profundidad. Solo esperamos que, al margen de las etiquetas, el público pueda disfrutarlo tanto como nosotros. Al fin y al cabo seguimos siendo y sonando a BLUEBERRY HILL.

¿Tenéis gira de presentación ya programada?

Vamos montando los conciertos poco a poco, sobre la marcha. De momento, hemos estado presentándolo en Barcelona y, antes de navidad, pisaremos Madrid y Mallorca.

¿Probaréis otra variación de estilo en vuestro próximo disco?

¡Nunca se sabe! En menos de un año han aparecido raps, canciones de navidad, temas en castellano, en catalán... Pero no nos avancemos, ahora toca disfrutar con éste. Como diría Eckhart Tolle, vive el aquí y el ahora.