Willie Nile: El buen gusto del trabajador del rock


JUANJO ORDÁS
Efe Eme




Willie Nile no es una estrella de relumbrón, es un currante nato del rock, un tipo sobrado de clase y estilo que factura rock clásico norteamericano para gente con buen gusto. Es un enorme escritor de canciones, como muy bien sabe su amigo Bruce Springsteen. Su reciente “House of the thousand guitars” (Blue Rose Records) es uno de los mejores discos de rock del año

La primera vez que escuché ‘House of the thousand guitars’, la primera canción de tu nuevo disco, realmente me impresionó, es un inicio muy poderoso. ¿De dónde proviene esa energía?

No lo sé. Me parece que es porque creo en ello y significa algo para mí. Me gusta la idea de un lugar donde los grandes músicos pudieran ir, juntarse y hacer música alejados de toda la fama sin sentido. Y es divertida de cantar.

Esta canción muestra todas tus influencias, nombre a nombre.

Bueno, muestra muchas de ellas. Hay otras, pero admiro y amo la música que esos chicos hicieron.

El título no engaña, es un disco orientado a las guitarras, incluso en las canciones lentas. ¿Buscaste este tipo de sonoridad?

Oh, sí. Me encanta rockear y esa vibración. Me vino nada más comenzar a escribir la canción.

La canción ‘Her love falls like rain’ está muy influida por los Beatles, ¿es tu homenaje personal?

Está muy influidas por ellos y fue muy divertida de escribir y grabar.

De hecho, en su día abriste para Ringo Starr. ¿Qué recuerdas de aquella experiencia?

Abrí una de las primeras giras que hizo con su All Starr Band. Dave Edmunds, Nils Lofgren y Todd Rundgren eran parte de su banda. Fue un gran momento. Abrí parte de los conciertos del tour y fue un honor y un gusto. La última noche de la gira me encontraba a un lado del escenario viendo a Ringo acabar su set y cuando salió del escenario antes de los bises, me vio, se acercó, me dio un gran abrazo y me agradeció haberle teloneado, dijo que había hecho un gran trabajo y me preguntó si querría unirme a él para cantar ‘With A Little Help From My Friends’. Así que me puse mi chaqueta y canté junto a él para 25.000 personas. Me emocionó muchísimo. Fue genial verle cada noche y escuchar todas estas canciones tan mágicas.

Hay un punto importante del disco, me refiero al que tiene lugar entre las canciones ‘Now that the war is over’ y ‘Give me tomorrow’, tristeza contra esperanza.

Pienso que así es. Hay un momento que se sitúa en esa línea. Me gusta.

A todo esto, ¿usó Obama finalmente ‘Give me tomorrow’?

No lo sé. Sé que su gente la escuchó y quisieron usarla pero solo quedaban dos semanas de campaña y no sé si la llegaron a emplear. Estaba en Chicago hace dos semanas con un fotógrafo que pasó un año y medio de campaña con Obama. Este fotógrafo es fan del disco, le conté esta historia y me dijo que se lo haría llegar a personal importante de la Casablanca, así que sé que sonó allí. Tengo mucha fe en Obama y espero que pueda ayudar a hacer del mundo un lugar mucho más compasivo. No será fácil, pero creo que es una persona muy especial y que proviene de un lugar bueno y honesto. Le deseo lo mejor.

En el disco empleas dos bandas distintas, ¿por qué?

No tuve demasiado tiempo para trabajar con la banda formada por Andy York, Rich Pagano y Brad Albetta. Son personas muy ocupadas y estuve muy contento de obtener de ellos lo que obtuve. Las otras seis canciones las hice con Frankie Lee y Steuart Smith y me encanta como quedaron. Que las canciones funcionen bien juntas es mérito de ellas mismas y de estos grandes músicos. Me parece un disco consistente de canción a canción.

Uno de mis temas favoritos es ‘Magdalena’, suena cruda, el riff de guitarra es casi punk. ¿Disfrutaste de las escena punk de los setenta?

Muchísimo. Solía ir sin parar al CBGB’s para ver a Television, Patti Smith, The Ramones, Talking Heads, The Cramps, entre otros. Fue una gran época para la originalidad y la buena música.

Muchas de las canciones están compuestas junto al batería Frankie Lee, ¿cómo trabajáis juntos?

Ambos escribimos música y letras, lo pasamos bien haciéndolo. Cualquiera de los dos tiene una idea y la trabajamos juntos. Es muy sencillo para ambos. Frankie es brillante y un gran tipo.

LAS RAZONES DEL ÉXITO

Dicen que nunca alcanzaste el éxito comercial pero yo creo que el éxito real de un músico es hacer lo que quiera con su música, como haces tú.

Creo que el éxito real depende de lo buenas que sean las canciones. Que las escuchen diez personas o diez millones es solo una evaluación cuantitativa de ello. Solo porque a diez millones de personas les guste algo no significa que sea bueno. Me encantaría ganar mucho dinero y tenerlo todo hecho, pero estoy ciertamente más que satisfecho con la calidad del trabajo. Cada vez que canto las canciones y las toco en directo es un éxito para mí. Estoy agradecido de haber llegado a hacer lo que hago. Aún giro tocando mi música por diferentes partes del mundo. Toqué para 40.000 personas en septiembre, en un festival en Lisboa, y toqué con Bruce Springsteen para 77.000 personas en el Giants Stadium hace unas semanas. Aunque lo importante es que todo el mundo lo pasó bien y la música fue buena.

Vamos a hablar un poco más de tu pasado. Comenzaste a expresarte como poeta. ¿Qué recuerdas de tus comienzos?

Solo que nací en el seno de una gran familia con mucho amor y compasión. Hacíamos intercambios con estudiantes extranjeros y cientos de visitantes de diferentes tierras. Me hizo darme cuenta de que, aunque hay muchas diferencias entre nosotros, como las costumbres, el lenguaje o la ropa, todos somos hermanos y hermanas en este mundo. Combina esto con una casa en la que había música clásica, rock y todo tipo de música sonando todo el tiempo y obtienes un escritor de canciones que adora escribir todo tipo de música.

¿Alguna vez has coincidido con Leonard Cohen? Él comenzó como tú, escribiendo.

Nunca le he conocido en persona, pero sí, yo escribí poesía antes que canciones. Leonard es enorme, único.

Tú y Jeff Buckley fuisteis amigos, ¿cómo era vuestra amistad?

Conocí a Jeff en New York. Yo estaba en el club Sine cuando fue descubierto por Columbia Records. Jeff era un buscador, un aventurero y un cantante y artista increíble. Tan solo estaba empezando. Ibamos a escribir juntos. La última vez que le vi fue en algún club de New York. Me vio, se acercó y me dio un gran abrazo. Le echo de menos.

En tu opinión, ¿que diferencias hay entre la escena musical de cuando comenzaste y la actual?

Me gustaba más la radio de entonces. Ahora está más fragmentada y no hay tantas buenas emisoras. Hay algunas, pero no tantas. Respecto a la música que se hace, bueno, mucha de la música de entonces apestaba y mucha de la música de hoy apesta, así que en ese sentido creo que hay muchas similitudes entre el pasado y el presente. Dicho esto, siempre se hace muy buena música. Simplemente tienes que saber dónde encontrarla.

Actualmente estás viviendo casi una segunda juventud. ¿Qué es lo que más echas de menos del pasado?

No demasiado. El hoy en día es genial. Por alguna razón las canciones parecen ir mejorando y estoy muy agradecido por ello.

¿Estarás tocando pronto en España?

Sí, en diciembre toco en Madrid como parte del tour de apoyo a la fundación para la investigación del parkinson Light of Day. Creo que el 13 de diciembre estamos en Madrid. Después haré un tour a finales abril y primeros de mayo. No puedo esperar. El público de Madrid es increíble. Rockean.