Las ONG culpan a España de los muertos ante la valla de Melilla


Exigen investigar los disparos a un subsahariano abatido por la Policía marroquí en la frontera


OLIVIA CARBALLAR
Público


Porque la Unión Europea y el Gobierno español lo consienten. Por eso murió a tiros el pasado jueves un subsahariano a manos de la Policía marroquí; y por eso seguirán muriendo más personas en su intento de huida de la pobreza. Así de contundentes se muestran los colectivos de ayuda a los inmigrantes y en defensa de los derechos humanos, entre ellos, Amnistía Internacional y SOS Racismo.

"El disparo en Marruecos se hace con armas y balas pagadas por España; esa muerte vincula claramente a España, pues es consecuencia directa de la ejecución de sus leyes y políticas", denuncia SOS Racismo en un comunicado. Por ello, las ONG exigen al Gobierno aclarar la muerte del subsahariano, que fue abatido a tiros al intentar cruzar hacia España junto a otros 80 inmigrantes. De ellos, 14 fueron detenidos y el resto consiguió huir.

¿Pero se abrirá efectivamente una investigación? Amnistía Internacional lleva más de tres años esperando una respuesta sobre las muertes de 13 inmigrantes, en 2005, en las vallas de Ceuta y Melilla, tras haber preguntado en reiteradas ocasiones al Gobierno. "Tanto el Ejecutivo español como el marroquí dijeron que investigarían esas muertes", sentencia Virginia Álvarez, responsable de Política Interior de Amnistía Internacional.

Y añade: "A principios de 2008, el Ejecutivo presentó un balance en el que destacaba la disminución de la llegada de inmigrantes, pero no se refirió al coste humano que eso había supuesto. A mayor externalización de fronteras, mayor riesgo para la vida y los derechos humanos, y lo que ocurrió ayer [por el jueves] es un claro ejemplo", denuncia Álvarez.

Para el secretario de Andalucía Acoge, José Miguel Morales, "todas esas muertes son fruto de la política de externalización de fronteras; la UE está financiando a países semidictatoriales, como Marruecos, para que ejerzan de gendarmes pero no controla cómo lo hacen, no se preocupa por los métodos, como los usados contra esteinmigrante".

Mirar para otro lado

José Alonso, responsable de Pro Derechos Humanos de Melilla, asegura haber visto la noche antes un helicóptero vigilando la frontera: "Tenía unos focos enormes. España está pagando los medios para esta represión y ya son demasiados muertos: unos porque resulta que se ahogan y otros porque se caen por los acantilados. Ya está bien de echarle el muerto a los demás y de mirar para otro lado", zanja.

La solución: cesar los acuerdos migratorios con Marruecos hasta que deje de matar. Al menos, eso es lo que exigirán las ONG a la Unión Europea. "En caso de violaciones de los derechos humanos de los ciudadanos expulsados, el Estado español podría ser cómplice de estas violaciones en el marco del Convenio Europeo de Derechos Humanos", asevera SOS Racismo.